Saúl Niguez llegó mañana desde este lunes a Sevilla cerrar su expediente e incorporarlo a las fichas del club de Nervión como precedente de traspaso del Atlético de Madrid para la temporada 2024-25. El activista fue despreciado hace unos días por sus compañeros del destacamento comandado por Diego Pablo Simeone y ahora emprende una nueva etapa de las operaciones de Xavi García Pimienta.
Saúl se convierte así en la sala sevillana tras el Ejuke, Petit y Lokonga. Víctor Orta, director deportivo rojiblanco, optó principalmente por reforzar la médula espinal en su reestructuración del equipo para alcanzar los objetivos no conseguidos por el curso anterior y condicionados también por la situación económica del club.
La negociación del Sevilla por Saúl no era una simple cuestión de si el diálogo se había configurado para que el Atlético se liberara y pudiera confirmar varias temporadas, sino la falta de acuerdo entre el futbolista y el equipo de Metropolitano provocó que finalmente se cerrara el pacto en un abrir y cerrar de ojos donde el Sevilla perdería tres millones de euros en salario de jugadores (el resto lo pagaría el Atlético).
Según el Orgullo de Nervión, este traspaso podría aplazarse un año más, siempre y cuando las tres partes estén cumpliendo. Con este despacho se confirma que el Sevilla se presentó en la segunda semana de mercado para hacer ganar a su equipo, pero aún queda mucho por hacer en el espacio de salida.
Saúl busca recuperar su mejor versión como jugador en el Sevilla, tras perder el título ante el Atlético de Madrid. La buena relación de Orta con el agente y su hermano El futbolista (con el que coincidió durante su etapa en Elche) sugirió que el activista pensara en el club de Nervión para buscar una segunda oportunidad.
